De 2001 a 2020, el valor total de las exportaciones de Estados Unidos a Cuba en productos agrícolas, alimentos, medicinas y suministros médicos ascendió a 6 308 778 608 USD. Para 2018, según datos del Observatorio de Complejidad Económica, Estados Unidos ocupaba el octavo lugar en procedencia de las importaciones de la Isla, con un 4.04 % del total; mientras que Cuba se ubicaba en el puesto 60 (de un total de 226) de los mercados de exportaciones de alimentos y productos agrícolas de Estados Unidos, señala un informe publicado por el Consejo Económico y Comercial Estados Unidos-Cuba.
Desde que el Congreso de Estados Unidos votara a favor de imponer un embargo económico a la Isla, en 1962, las relaciones comerciales entre ambos países se mantuvieron prácticamente detenidas por varias décadas. Sin embargo, a partir de 2001, comenzó un flujo relativamente estable de exportaciones hacia Cuba, como resultado de modificaciones a la legislación estadounidense.
Medicinas y suministros médicos
Con la aprobación de la Ley de Democracia Cubana (CDA, por sus siglas en inglés) –también conocida como Ley Torricelli, por el nombre del congresista que la patrocinó, Robert G. Torricelli– en 1992, se autorizaba la exportación hacia Cuba de alimentos, medicinas y suministros médicos con fines humanitarios. Para ello no se estipulaba la necesidad de pago por adelantado, pero sí se requería verificación de uso final.
Los productos enviados a Cuba como resultado de esta ley han incluido equipos e instrumentos médicos, productos farmacéuticos, penicilina, insulina, pasta de dientes, reactivos de laboratorio, equipos de ultrasonido, prótesis, cánulas y otros, según el reporte del Consejo Económico y Comercial Estados Unidos-Cuba. En total, se han gastado 28 443 282 USD de 2003 a 2020, con el 2016 como el año con mayores gastos, con 6 121 435 USD.
Donaciones humanitarias
Estas se rigen por la reestructuración realizada por el Departamento de Comercio de Estados Unidos, en marzo de 1996, a las Regulaciones de Administración de Exportaciones, las cuales permitían el envío de productos que sirvieran para cubrir necesidades básicas.
Los artículos autorizados eran clasificados en las categorías de Salud, Alimentos, Ropa y Artículos Domésticos, así como Educación y Construcción. En el primer grupo se permitían equipos para minusválidos, suministros y equipamiento para laboratorios y hospitales, dispositivos médicos, medicinas, vitaminas, equipos de recursos hídricos, alimentos, materiales y maquinaria para la agricultura, equipos para pruebas e investigaciones agrícolas, fertilizantes, además de suministros y equipos para la pesca.
Dentro de los clasificados como Alimentos se incluían insecticidas, pesticidas, semillas, equipos de irrigación de pequeña escala y suplementos y medicinas veterinarios. La Ropa y Artículos Domésticos comprendía vestimentas, ropa de cama, utensilios de cocina, telas, artículos de aseo personal, equipos para la fabricación de jabón y para costura y tejido.
Se aprobaban también los materiales de construcción y herramientas manuales dentro de la categoría de Construcción; además de libros, artículos escolares individuales, muebles y suministros para la educación especial en el apartado de Educación.
Las cuantías de tales donaciones fueron de 35 802 293 USD entre 2014 y 2020, con 2018 como el año con mayor valor.
Para realizar los envíos se encontraban autorizadas las organizaciones que tuvieran experiencia demostrada en la participación en programas de donaciones y en el mantenimiento y verificación de un sistema de distribución que asegurara la entrega a los beneficiarios, especifican las regulaciones. Al mismo tiempo, los artículos debían ser proporcionados a los beneficiarios libre de costos, aunque no se consideraban las tarifas de importación que pudieran ser aplicadas a los productos.
Alimentos y productos agrícolas
En octubre de 2000, las excepciones fueron ampliadas a la exportación comercial directa de alimentos y productos agrícolas, independientemente del propósito, a través de la Ley de Reforma a las Sanciones Comerciales y Mejoramiento de las Exportaciones (TSREEA, por sus siglas en inglés), aunque era necesario tramitar una licencia de exportación, expedida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro. En diciembre del año siguiente, después del paso del huracán Michelle, arribaron a la Isla las primeras importaciones de alimentos procedentes de Estados Unidos.
Desde esa fecha, las exportaciones de este tipo han adquirido un valor de 6 292 209 200 USD. Algunos productos como huevos, mantequilla, comida enlatada y sopas se han importado en una sola ocasión; otros han sido comprados con mayor frecuencia:
Dentro de los productos más insólitos que se han importado están las bebidas alcohólicas, como la cerveza, adquirida en 2020 por un valor de 70 656 USD, y whisky y bourbon en 2015, por 61 335 USD; galletas dulces en 2017, por 3 878 940 USD; salsas congeladas de aves de corral en 2013, por 1 527 211 USD; y papel periódico en 2003, por 4 440 255 USD.
Estos bienes son vendidos al país por más de 90 compañías de Estados Unidos y enviados desde 37 puertos diferentes de esa nación.
Durante los últimos años se ha visto una reducción acumulada en las importaciones de la Isla, las cuales disminuyeron aún más en 2020, en comparación con los mismos periodos del año anterior (2019), con excepción de los meses de octubre y noviembre.
De acuerdo con el Consejo Económico y Comercial Estados Unidos-Cuba, la reducción acumulada en las exportaciones ha ocurrido por varias razones. Entre las principales destacan la disminución de la capacidad de Cuba para obtener divisas extranjeras; los beneficios financieros otorgados al país por Venezuela y China; la reanudación o continuación de relaciones comerciales con Argentina, Brasil, Canadá, España, Francia, Irán, México, Nueva Zelanda, Rusia, Vietnam, y otras naciones; así como la preferencia del gobierno cubano de adquirir productos procedentes de entidades gubernamentales que ofrezcan términos de pagos más favorables.
Los pagos por las importaciones desde Estados Unidos siguen la modalidad de cash in advance (pago por adelantado), la cual implica que estos deben hacerse antes de la entrega de los productos o, incluso, en ocasiones, previo a la salida del envío de puertos estadounidenses.
Durante la administración de Barack Obama (2009-2017), como parte de su política hacia la Isla, se ampliaron las listas de productos autorizados para exportar a Cuba, donde se incluyeron bienes duraderos, no duraderos, consumibles y equipos agrícolas.
Con la elección de Donald Trump, se aplicó una política general de denegación de licencias de exportación hacia Cuba; sin embargo, ello no implicó que las importaciones procedentes de Estados Unidos se detuvieran, pues permaneció la autorización para ciertos productos.
En general se aprobaban las ventas y donaciones de medicinas y dispositivos médicos; las exportaciones de artículos que garantizaran la seguridad de las operaciones de la aviación civil y vuelos comerciales participantes en el transporte aéreo internacional; así como artículos de telecomunicaciones que contribuyeran a mejorar las comunicaciones del pueblo cubano.
Para las mercancías destinadas a cubrir las necesidades de los cubanos, incluidas aquellas compradas por empresas estatales y otras organizaciones del gobierno de Cuba encargadas de proveer bienes y servicios para el uso y beneficio del pueblo, se revisaba cada caso en particular.
Un ligero avance en las relaciones comerciales entre ambos países ocurrió en diciembre de 2018 con la aprobación de la Ley de Mejoramiento Agrícola por el Congreso de Estados Unidos. La legislación permitía que los productores que recibían subvenciones federales del Departamento de Agricultura para promocionarse en los mercados pudieran emplear tales fondos para realizar estas labores de promoción en Cuba.
Engage Cuba, una coalición de compañías privadas y organizaciones que abogan por el fin del embargo hacia la Isla, señalaba en ese entonces que esta autorización sentaba las bases para un comercio más completo entre Cuba y Estados Unidos.
Y porque de repente, han descendido abruptamente?
Por lo que aqui consta el tal bloqueo no es tanto bloqueo como el gobierno de la Isla dice,y expone que el estallido social en Cuba es producto de la cricis economica en el pais generada por el embargo economico y comercial que los Estados Unidos han impuesto a Cuba.
usted tiene toda la razon amigo corsario, pero para el que esta fuera de la sociedad cubana y la vive desde lejos, esta totalmente ajeno o se hace el desentendido, y culpa a la revolucion cubana, sin importarle la seguridad que realmente se vive en el país. Ejemplo de ello es que se ha comprobado que muchas de las imagenes que se han publicado son de otros paises como Palestina, Egipto, Costa Rica o Colombia (la que por cierto ahora esta haciendo reclamos increiblemente), y todo esto simplemente a ayudado a confundir a muchos que tenian fe plena en el sistema estatal cubano.
Sin embargo despues de aquello, el pais continua con la misma paz ciudadana que siempre ha tenido y que nos han tratado de arrebatar.
Sencillo la Economía Centralizada de Cuba es ineficiente la evidencia empírica así lo ha demostrado pero es el único modelo que tienen para someter al Pueblo mediante la Miseria y la Represión.
Husanga debe ser del COCE porque defiende lo indefendible. Sería bueno que alguien le contara la verdadera situación que vive la gente, seguramente la que no está en su entorno de millonarios, y la desesperanza, depresión y hambre física que han padecido por décadas. Será que él cree que la gente sale en balsas y barcos viejos a pasear? a suicidarse? Por Dios mejor no hable porque da la impresión de tener los cables fundidos.